El dispositivo, presentado hace dos semanas, ha sido construido en policarbonato, un material que ya utilizan fabricantes como Samsung. La compañía ha utilizado este material para la gama Lumia, a excepción de un modelo reciente, el Lumia 925, que dispone de una coraza principal de aluminio, lo que dio alas a la imaginación de muchos analistas quienes sugerían que los próximos productos irían en este sentido.
Sin embargo, el nuevo buque insignia de Nokia ha optado por aparecer en policarbonato, que estará disponible en amarillo, blanco y negro. La firma decidió que el nuevo terminal fuera en mate para generar un sentimiento de «mayor calidad», según escriben en el blog corporativo.
«La capa superior también ha sido mejorada con un sistema anti-huella digital en un acabado resistente a la suciedad», explica la compañía, quien se declara «orgullosa de ser de policarbonato». Mientras que el uso del metal en el Nokia Lumia 925 ha ganado muchos admiradores, nunca fue pensado como poner fin a la larga y orgullosa historia de Nokia con este material.
«Somos una empresa líder en la ejecución de policarbonato de alta calidad y el Nokia Lumia 1020 sigue el éxito y el carácter que hemos establecido desde el Nokia N9», señala Jaana Beidler, del departamento de diseño de Nokia, quien destaca que han creado seña de identidad con este producto.
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